Por Angel Di Matteo   @shadowargel

La Casa Blanca defendió la idea de aplicar un impuesto del 30% sobre el costo de la energía a las empresas de criptominería. Alegó que dichas actividades implican un alto consumo energético y aportan pocos beneficios.

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  • Casa Blanca busca implementar impuesto del 30% sobre el consumo eléctrico a las empresas de criptominería
  • Defienden que estas actividades acarrean importantes costos energéticos y no aportan nada al país
  • Consideran que la criptominería puede resultar perjudicial en distintos aspectos
  • La propuesta fue presentada por la administración de Biden en marzo y debe votarse ante el Congreso

El Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca de EE.UU., mejor conocidos por las siglas CEA, propuso imponer un impuesto punitivo a las operaciones criptominería en el país, alegando que dicha actividad conlleva daños para la sociedad.

Así lo indico el CEA en una nueva publicación a través de su página oficial, donde el organismo defendió la idea de aplicar un impuesto del 30% sobre el costo de la energía eléctrica para las empresas de criptominería, sanción con la que esperan impactar sobre las ganancias que perciben estas organizaciones.

Después de un período de incorporación gradual, las empresas enfrentarían un impuesto equivalente al 30% del costo de la electricidad que utilizan en la criptominería. 

La publicación continúa detallando que, actualmente las empresas de criptominería no tienen que pagar el costo total que imponen a los demás, en forma de contaminación ambiental local, precios más altos de la energía y los impactos del aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero. “El impuesto anima a las empresas a empezar a tener más en cuenta los daños que imponen a la sociedad”, añade.

El impuesto estaría contemplado dentro de la propuesta tributaria contemplada para activos digitales, minería y energía (DAME), la cual estaría incluida dentro del Presupuesto para el año fiscal 2024 presentado por la administración del presidente Joe Biden. La intención de aplicar dicha medida sobre las actividades de criptominería se hizo por primera vez a inicios de marzo en un documento publicado por el Departamento del Tesoro, bajo la premisa de que este podría recaudar unos USD $3.500 millones de cara a los próximos 10 años.

Estigmatizando las actividades de criptominería

Si bien el gobierno estadounidense aún no ha fijado postura oficial hacia las criptomonedas, si se ha referido en reiteradas oportunidades a las implicaciones de las actividades de criptominería, indicando que estas implican grandes costos energéticos, y que si no se usan energías renovables, podrían derivar importantes consecuencias medioambientales.

Al respecto, en la publicación del CEA se lee:

Si bien los criptoactivos son virtuales, el consumo de energía vinculado a su producción intensiva en computación es muy real e impone costos muy reales, como se destaca en un capítulo del Informe económico del presidente de este año (titulado “Activos digitales: reaprendiendo los principios económicos” ).

“Informes recientes del New York Times destacaron la escala del consumo de energía asociado con 34 de las operaciones de criptominería más grandes, que calcularon como igual a la energía utilizada por los 3 millones de hogares circundantes… La cantidad de electricidad utilizada en la criptominería en los Estados Unidos en 2022 fue similar a la que se usa para alimentar todas las computadoras domésticas o la iluminación residencial del país”, continúa.

Indican que un incremento en las actividades de criptominería podría implicar un aumento en el precio de la energía eléctrica por un repunte en la demanda, especialmente tomando en cuenta que no habría intenciones de mejorar la capacidad para abastecer a esta industria dado que es geográficamente móvil y poco clara su estabilidad comercial.

También destacan que la criptominería no genera beneficios económicos locales como lo hacen otras empresas que usan cantidades similares de electricidad. El CEA considera que hay poca evidencia de los beneficios de esta actividad para las comunidades locales “en la forma de empleos y/u oportunidades económicas”.

Vale destacar que esta aún es una propuesta, por lo que los miembros del congreso deberán debatir para ver si se aprueba dentro del nuevo plan presupuestario. Algunos analistas consideran poco probable que esta iniciativa prospere, especialmente dentro de la bancada republicana dados los esfuerzos que ha hecho para despenalizar al sector de las criptomonedas.

Pero si fuese el caso, de llegar a implementarse este impuesto aplicaría sobre algunas de las empresas de criptomiería más grandes de EE.UU., como lo son Riot Platforms (RIOT), Marathon Digital (MARA), Cipher Mining (CIFR), Greenidge Generation (GREE), BitDeer (BTDR) y CleanSpark (CLSK).

Artículo de Angel Di Matteo / DiarioBitcoin

Imagen de Unsplash

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