Fork

En el contexto de las criptomonedas y blockchain, un “fork” se refiere a una división en la cadena de bloques que resulta en dos o más versiones separadas de la blockchain. Un fork puede ser el resultado de un cambio en el código o las reglas de consenso de una blockchain, lo que significa que los nodos que no se actualizan para aceptar las nuevas reglas serán incompatibles con los nodos que sí lo hacen.

Hay dos tipos principales de forks: hard forks y soft forks.

1. Hard Fork: Un hard fork es un cambio en las reglas de consenso de una blockchain que no es compatible con versiones anteriores. Esto significa que todos los nodos de la red deben actualizarse para seguir siendo compatibles con la nueva versión de la blockchain. Un hard fork puede resultar en la creación de una nueva criptomoneda si una parte significativa de la red decide seguir usando la versión antigua de la blockchain. Un ejemplo famoso de esto es el hard fork de Bitcoin que resultó en la creación de Bitcoin Cash en 2017.
2. Soft Fork: Un soft fork, por otro lado, es un cambio en las reglas de consenso que es compatible con versiones anteriores. Esto significa que los nodos que no se actualizan aún podrán interactuar con los nodos que sí lo hacen, aunque pueden perder algunas funcionalidades. Los soft forks no suelen resultar en la creación de nuevas criptomonedas.

En resumen, un fork es un mecanismo que permite la evolución y adaptación de las blockchains a nuevas necesidades o cambios en el consenso de la comunidad. Sin embargo, también pueden ser fuente de conflictos y divisiones dentro de la comunidad de una criptomoneda.

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