Miembros de la Asamblea francesa aseguran que estas monedas digitales pueden ser utilizadas por piratas informáticos para perpetuar delitos, ya que no es posible rastrear las operaciones a través de un explorador de bloques como en el caso de Bitcoin y otras.
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El Comité de Finanzas de la Asamblea Nacional de Francia se pronunció en contra del uso de las criptomonedas que implementan fuertes medidas para garantizar la privacidad de las operaciones, lo cual lleva a la posibilidad de que monedas digitales como Monero, Dash y Bitcoin Private sean ilegales en el país.
Esta no sería la primera vez que un país intenta prohibir el uso de las monedas digitales con fuerte énfasis en la privacidad. Si bien la perspectiva de los gobiernos se inclina cada vez más a favor del uso de las criptomonedas, todavía hay un fuerte rechazo hacia los activos digitales que ofrecen este margen de libertad a las personas para operaciones financieras.
El ministro de presupuesto y trabajo, Éric Woerth, expuso en un informe publicado por el comité:
Debemos ser conscientes de los problemas que pueden presentar las criptomonedas a la hora de hablar de fraudes, evasión fiscal, lavado de dinero y consumo energético. También sería apropiado proponer una prohibición para la difusión y comercio con monedas digitales creadas para garantizar completo anonimato evitando filtrar la información de los usuarios… Este es el caso de ciertas monedas digitales (Monero, PIVX, DeepOnion, ZCash…), cuyo propósito se fundamenta en mantener oculto cualquier dato asociado con los titulares. De momento, las regulaciones sobre las criptomonedas no llegan tan lejos como para abordar estos aspectos.
Criptomonedas enfocadas en la privacidad
Las monedas con énfasis en la privacidad funcionan como cualquier otra criptomoneda, aunque implementan ciertas medidas que ayudan a mantener en secreto los datos asociados con la operación realizada.
Las criptomonedas como Bitcoin, aunque manejan transacciones anónimas, pueden rastrearse observando con detenimiento los movimientos y transacciones realizadas desde la billetera a través de un explorador de bloques. Por su parte, las monedas privadas minimizan el nivel de exposición para garantizar total descentralización, por lo que resulta imposible rastrear a los comerciantes e inversionistas que usan dichos tokens.
Aunque esto suena muy bien para mucha gente, deja una brecha para personas que llevan a cabo delitos y reciben la remuneración correspondiente en monedas privadas, por lo que los gobiernos están muy preocupados por el uso que se le pueda dar a estas.
Medidas por parte del gobierno francés
Expertos aseguran que es muy poco probable que Francia emita una prohibición general hacia las criptomonedas con énfasis en la privacidad en el corto plazo, ya que será muy difícil para el gobierno bloquear el uso de estos activos digitales y permitir el comercio con otras monedas virtuales.
En caso de que se quiera detener las operaciones con estos tokens, el gobierno tendría que aplicar medidas efectivas para todas las monedas digitales. Dada la postura progresista con la que Francia aborda legalmente el uso de las criptomonedas, resulta improbable pensar en soluciones tan radicales, ya que estas representarían un retroceso para la nación europea en materia de Blockchain y monedas virtuales.
Fuente: Cryptodaily
Versión de Angel Di Matteo / DiarioBitcoin
Imagen de Pixabay
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